jueves, 31 de mayo de 2012

La momentanea akrasia de Batman


La akraisa es un término que usaban los antiguos filósofos griegos. Para aclarar que es la akrasia voy a seguir la explicación que podemos encontrar en la Standford Encyclopedia of Phylosophy en la entrada dedicada a la ética de Aristoteles(1).

El concepto opuesto a la akrasia es la enkrateia. Para entendernos, una persona que sucumbe a la akrasia es una persona akratica, lo cual significa que es una persona que actúa en contra de la razón, esto es así porque se deja llevar por algún sentimiento o emoción. Por otro lado, la persona que está dominada por la enkrateia, será una persona enkratica, en este caso al igual que antes, la persona también se ve influenciada por algún sentimiento o emoción, pero ahora dicha persona es capaz de controlar sus sentimientos, es decir, no se deja llevar y actúa acorde a lo que le dice la razón.

Para Aristóteles existían dos clases de personas akraticas, las impetuosas y las débiles. Fijémonos en las primeras. Las personas akraticas impetuosas, según Aristóteles, no llevaban acabo un proceso de deliberación racional para realizar un determinado curso de acción sino que se dejaban llevar directamente por alguna pasión o algún sentimiento. Por otra parte, las akraticas débiles serían aquellas personas que a pesar de llevar acabo una deliberación racional sobre que curso de acción tomar, eligen  dejarse llevar por la pasión y los sentimientos.


Una vez más los superhéroes nos van a poner en bandeja el poder ilustrar conceptos filosóficos. En esta ocasión vamos a ver un ejemplo donde el héroe por un momento actúa como un akratica impetuoso, pero instantes después se repone y da un paso que le convierte en una persona enkratica, es decir, consigue  controlar sus emociones, se toma su tiempo para deliberar racionalmente cual es el mejor curso de acción que puede tomar, y el resultado es que no le sale del todo mal.

El héroe en cuestión no es otro que Batman, el conocido Caballero Oscuro, me consta que más de un lector estaba esperando a que apareciera por este blog. La acción tiene lugar en la película Batman Begins. Bruce Wayne, el cual acabará convirtiéndose en Batman, está siendo entrenado por su maestro. En un momento determinado su maestro le dice que la culpa de la muerte de sus padres es de su padre, que no hizo nada. En ese momento Bruce se deja llevar por la ira, es decir, actúa como una persona akratica impetuosa, lo cual no le da muy buenos resultados como su propio maestro le indica. Acto seguido, Bruce se calma, piensa, y entonces si consigue tener éxito en la empresa de derribar a su maestro:


Para ser honestos una persona no cae en la akrasia por un momento de ofuscación, para Aristoteles una persona era akratica cuando siempre o el mayor número de las veces actuaba de forma akratica.

El dialogo entre maestro y alumno nos pone sobre la mesa otra discusión interesante, la debilidad de la voluntad. En filosofía “la debilidad de la voluntad”(weakness of will) consiste en que una persona desarrolle un curso de acción  cuando en realidad parece que su mejor deliberación racional le indica que debería haber optado por otra opción. El maestro de Bruce acusa a su padre de ser el responsable de su muerte y la de su esposa, porque no hizo nada. Claro que esto no es cierto, el padre de Batman si hace algo, no se queda completamente congelado, esto es algo que el maestro sabe, así pues, lo que parece estar queriendo decir, es que el curso de acción que llevó acabo era inapropiado y/o erróneo.

Hay un interesante debate filosófico sobre si la “debilidad de la voluntad” es posible o no(2). Una corriente de pensamiento coincide con que en realidad la “debilidad de la voluntad” no se puede dar. Esta corriente de pensamiento llega hasta el mismísimo Sócrates. Él lo expresaba así en el dialogo Protágoras:

Nadie que crea o sepa que hay otro curso de acción posible mejor que el que él está llevando acabo continuará actuando de esa manera

Otra corriente de pensamiento señala que la “debilidad de la voluntad” sí que es posible. No obstante, sin necesidad de entrar en esa discusión a fondo, lo cierto es que la postura de Bruce Wayne es superior a la de su maestro. El argumento de su maestro no es correcto. Por un lado confunde lo que para él habría sido el mejor curso de acción con lo que sería el mejor curso de acción para el padre de Bruce. Esto, obviamente, no tiene porque ser así, es decir, el curso de acción de dos personas distintas no tiene porque ser el mismo y aun así ninguna de ellas tiene que ser necesariamente víctima de la “debilidad de la voluntad”.

Para el filósofo Donald Davidson los juicios que realizamos para desarrollar a continuación algún tipo de acción son del tipo:

Dadas < c1, c2,...,cn >, la opción A en principio es mejor que la B.

Donde < c1, c2,...,cn > son todas las consideraciones a tener en cuenta para una situación determinada, y aquí es donde el maestro se equivoca y Bruce acierta. Lo que Bruce le recuerda es que no está teniendo en cuenta todas las consideraciones, datos y pruebas necesarias para llegar a esa conclusión. Como bien señala Bruce hay determinadas consideraciones importantes como el hecho de que el asaltante iba armado, que su padre no tenía ningún tipo de entrenamiento para afrontar ese tipo de situaciones, y posiblemente muchas consideraciones más. No deja de ser curioso que el maestro acabe incluso contradiciéndose. Cuando Bruce consigue derribarle el maestro no le acusa de haber actuado en contra de lo que su mejor juicio le ha dicho(“debilidad de la voluntad”), sino que le dice “has dado un mal paso por dar un buen golpe”, es decir, Bruce ha realizado su mejor juicio posible y ha actuado acorde con él, su problema ha sido que hay aspectos que se le han escapado. El maestro se muestra incoherente, ¿por qué obvia la importancia de considerar todos los aspectos en el caso del padre, pero no en el caso de Bruce?

Según Davidson esos juicios dependen de un conjunto de consideraciones, y esto nos presenta un problema. Bien puede ser que haya consideraciones que indiquen que hay que seguir el curso de acción A y otras que indique que dicho curso de acción no debería realizarse, esto nos obliga a reformularlo como sigue, donde representamos con s el conjunto de todas las consideraciones que hay que tener en cuenta:

J1: Dado s parece que el curso de acción a realizar sería A

Y esto cambia la situación, aquí lo que tenemos es que tomando todas las consideraciones, todos los datos, todas las pruebas, parece que la mejor forma de actuar es A, pero esto no implica que A sea lo que hay que hacer. Dicho de otro modo, no hemos alcanzado un juicio del tipo:

J2: Dado s, es mejor hacer A que cualquier otra cosa.

Y aquí es donde Davidson ve la puerta abierta para que la “debilidad de la voluntad” se cuele. Para Davidson dado el J1 se puede pasar al J2 a través de un principio racional que según él reza así:

Realizar la acción que se juzga mejor teniendo en cuenta todas razones relevantes

Para Davidson cuando alguien no es capaz de pasar de J1 a J2 es cuando se produce la “debilidad de la voluntad”. Ni que decir tiene que el debate no está cerrado ni mucho menos(2). Para nosotros la cuestión es ¿sufrió el padre de Bruce la “debilidad de la voluntad”? Vosotros ¿qué pensáis?

Para pensar más:
(1)-Aristotle ethics en la Standford Encyclopedia of Phylosophy
(2)-Weakness-will en la Standford Encyclopedia of Phylosophy
Batman Begins

4 comentarios:

  1. Creo que el maestro de Bruce, en la escena a la que haces mención, hace una afirmación cayendo así en algo en lo que cae mucha gente.

    Muchas personas opinan de cualquier otra situación sin encontrarse o haberse encontrado en ella, suponiendo como debería haberse desarrollado dicha situación. No sólo opinan de una situación en la que no se han encontrado, sino que tampoco tienen en cuenta los factores en los que se desarrolla dicha situación para esa persona.

    Cierto que es algo en lo que todos caemos en alguna ocasión, la diferencia está en, como hace en este caso el maestro de Bruce, menospreciar o infravalorar a la persona a la que se le presentó esa situación.

    Nunca hay que olvidar que dos situaciones iguales pueden desarrollarse de muy distintas formas, dependiendo de los factores externos y de las vivencias de la persona que se encuentra en dicha situación. Ambos parámetros son determinantes para la resolución de la situación.

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  2. El problema es que cuando decimos que “hay que ponerse en el lugar del otro” lo que solemos hacer es situarnos a nosotros mismos en esa situación, pero eso sólo nos aclara como habríamos actuado nosotros. Para entender la actuación de la otra persona hay que ponerse en esa situación y además hacer el esfuerzo de pensar como piensa esa persona, sólo así podremos quizá entender porque actuó como lo hizo.

    No obstante, Penélope no has contestado a la pregunta el padre de Bruce Wayne ¿sufrió de una "debilidad de actuar" o no? Te toca mojarte :D

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  3. Está bien, me mojaré...

    No, no creo que el padre de Bruce sufriera "debilidad de actuar". Creo que teniendo en cuenta todos los factores, hizo lo que quería hacer o lo que consideró correcto. Realmente sopesó sus opciones y vio que su única oportunidad podía ser hacer lo que quería el asaltante para que se marchara y que no sufrieran daño alguno. El bienestar de su familia estaba por encima de cualquier heroicidad que pudiera dañar a alguno de ellos.

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  4. Yo por mi parte, no creo que podamos saberlo.

    Digo esto porque es una situación en la que no sólo está él, sino que el resultado de la misma depende de al menos otro agente, en este caso el atracador. Lo cual lo complica todo. Porque puedes pensar cual es el mejor curso de acción pero eso dependerá en buena parte de lo que también haga la otra persona y eso es tremendamente dificil de hacer.

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