Yo solo era un joven, un irreflexivo adolescente, la primera vez que me convertí en el hombre araña... Pero los años pasan, y cambian el mundo a tu alrededor... Y cada niño, tarde o temprano, debe guardar sus juguetes; y volverse un hombre.(*)
*Gracias a Jesús Leal por pasarme la cita.
No estoy de acuerdo con la última metáfora. Creo que lo que mueve a las grandes mentes y a los creativos, es seguir "jugando". Es cierto que tener una actitud infantil ante la vida, es pernicioso; sin embargo pienso que, mantener la curiosidad de un infante, la capacidad de asombro, es lo que hace que la vida sea interesante.
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